Juan Ignacio Navas Marqués
Soy Juan Ignacio Navas Marqués. Mi actividad profesional es la abogacía, es mi vocación profesional. Me influyó mucho a tomar esa decisión el hecho de poder defender causas nobles y ser una carrera en la que cada día es apasionante. Nunca sabes con qué escenario o problema te vas a encontrar cada día, así como con qué personas conocerás o cuáles son sus problemas y en el que les vas a poder ayudar.
Mis valores personales
Es una profesión en la que cuando crees que has sido sorprendido en lo más hondo de tu conciencia por todo lo inimaginable, nunca te acabas de asombrar porque cada persona o cada institución suelen mostrar lo mejor de sí mismos en situaciones de agobio o de angustia mostrando, a su vez, su parte más débil, la más humana, porque cuanto más débil es una persona más constancia queda de que no es autosuficiente o imprescindible y necesita de los demás y su generosa ayuda.
La esencia más grandiosa de la abogacía es, en mi opinión, estar siempre del lado de la parte más débil. Por eso, entiendo y profeso que, como decimos algunos juristas, un abogado acaba de ser completo cuando se ha puesto “la toga”, es decir, cuando ha acudido a los Tribunales a actuar en defensa de su cliente.
La especialidad del despacho que dirijo, Navas & Cusí Abogados, es la defensa de personas y compañías que deben enfrentarse a entidades financieras, bancos, instituciones privadas o la propia Administración Pública que ostentan una posición muy superior a la de sus clientes o administrados, siendo un verdadero reto.
El mundo, la sociedad, siempre puede ser mejor cuanto más equilibrio y justicia exista en la sociedad compuesta por individuos, empresas y poderes fácticos. Todos son necesarios pero todos deben actuar bajo criterios de justicia y equidad.
Mis logros profesionales
Reconozco que, probablemente, la causa más difícil que he tenido que afrontar últimamente es la queja ante la Comisión Europea contra el Reino de España que, actualmente, se tramita por la Comisión Europea para que se adecúen las leyes financieras de nuestro país a las directivas de la Unión Europea. Frente a quienes creen que el mundo está regido por las reglas o leyes mercantiles, en Europa, en la pluralidad de Estado lo que impera es el derecho de la ciudadanía. Por eso, el Derecho de Consumo (consumo del que dependen las grandes corporaciones y empresas) incide tanto en las Directivas Comunitarias para tratar de proteger al individuo y a sus derechos.
En mi caso, en España y en el resto de Europa, anhelo que mejoren porque es una agrupación de Estados del mundo con más historia y filosofía de honda raigambre cristiana. En los últimos tiempos hemos asistido, atónitos a auténticas barbaridades y dislates, quiebras, concursos, inversores, ahorradores arruinados, y lo que es más grave, ejecutados en sus viviendas hipotecadas sin las debidas garantías y derechos que han visto como perdían su vivienda para más tarde recibir el más duro de los reproches del Tribunal Supremo de Justicia de la Unión Europea, órgano Supremo Judicial de los países miembros que configuran la Unión Europea.
He pleiteado con éxito contra multinacionales que abusaban de su poder contra otras empresas. El órgano Supremo de nuestro país se ha reunido en la Sala para cambiar en aplicación de ese derecho centenario llegando también a dicho Tribunal, que ha protegido a nuestros clientes de abusos del sistema bancario y financiero, del mercado de valores u obteniendo resoluciones pioneras en el Tribunal Constitucional.
Últimamente, afortunadamente, las cuestiones que se han debatido en nuestro despacho han sido en materia de injustificable abuso de los poderes financieros ante los Tribunales españoles e Instituciones Europeas. Hemos podido anticiparnos y plantear ante los centenares de procedimientos en los más complejos, injustos y grotescos abusos financieros en el mundo económico, empresarial individual, ahorrador e inversor.
Consecuentemente a mis valores, he impartido formación en Cámaras de Comercio de todo el país: Baleares, Islas Canarias, Colegio de Abogados de Madrid y Cámaras de Zaragoza, Santander, Orense, entre otras. También he impartido cursos, conferencias y encuentros en Bruselas.
Mi pasión por mi profesión me ha llevado a mí y al formidable equipo de profesionales que forma Navas & Cusí Abogados a escribir libros sobre la nulidad de la Hipoteca Multidivisa y Participaciones preferentes para Editorial Aranzadi, principal editorial jurídica de este país, siendo obras con gran trascendencia editorial. Actualmente, nos hallamos inmersos en la redacción de una obra extensa sobre derecho bancario.
Mi valor más importante es la familia. Mis aficiones deportivas, por orden, el ski, el motorismo, el golf y el tenis.
Mi filosofía en la vida es intentar ser cada día mejor, corregir mis errores y saber que solo se es feliz cuando se está pendiente de los demás.